LIDERAZGO
5 prioridades que los directores generales deben gestionar durante una crisis

Cuando se trata de gestionar una crisis -ya sea la caída de 1.000 puntos del Dow o un paro laboral que diezme tu cadena de suministro-, la única forma de afrontarla es aceptar el caos.
«Cuando tienes el valor de pasar a la acción, no sólo ves de lo que eres capaz, sino que ves lo que es posible, y sigues haciéndote más fuerte e innovador».
– Corinne Hancock, ponente de Vistage
El caos es lo que sucede cuando tu realidad difiere de tus expectativas. Si lo ves así, te da un lugar desde el que trabajar. No eres una víctima. Estás en un lugar desde el que puedes actuar.
Y aunque esa perturbación puede ser desde un inconveniente hasta un potencial destructor de la empresa, también puede impulsar la innovación y conducir a un mayor éxito en el futuro. Sólo es cuestión de aceptar que el caos forma parte del territorio.
Nunca estaremos a salvo del caos, pero podemos estar preparados para él. Hay ciertas cosas que podemos hacer en nuestras organizaciones y como directores generales para prepararnos para el caos.
He aquí 5 prioridades de gestión de crisis en las que los directores generales y los propietarios de empresas deberían centrarse sí -y cuando- se enfrentan a una crisis basada en mi sistema «Modelo del Caos».
- Encontrar la claridad de la misión
En primer lugar, piensa cómo va a responder tu empresa a esta crisis. Empieza a trabajar con tu equipo para encontrar soluciones al problema inmediato y deja de intentar adivinar cómo afectará a tus planes a largo plazo.
Ya no se trata de la visión de conjunto, sino de trasladar esa visión y nuestros grandes objetivos a este momento, a este próximo día, a esta próxima semana.
- Valorar y evaluar
Los directivos tienen que valorar rápidamente el impacto que está causando la crisis, evaluar los recursos con los que cuentan para trabajar y determinar lo que necesitarán para cumplir su misión.
Tienen que investigar y averiguar qué es realmente real y qué impacto está teniendo realmente esta crisis, no los temores percibidos y potenciales de lo que podría ocurrir.
- Ser creativo
También es una oportunidad para que los ejecutivos se vuelvan creativos en la resolución de problemas y pongan a prueba nuevas ideas. La crisis da a los ejecutivos la oportunidad de bloquear distracciones innecesarias y centrarse en el reto concreto.
Es el momento en que creamos algunas de nuestras soluciones más innovadoras. Se nos ocurren nuevos procesos cuando se empuja a la gente a probar cosas nuevas que nunca antes habían intentado.
- Conseguir alineación frente a acuerdo
Una vez que han encontrado una posible solución, los directivos deben centrarse en conseguir que su equipo esté de acuerdo. Es posible que algunos miembros del equipo no estén de acuerdo en si tendrá éxito, y su participación es clave para la implantación.
Nunca se va a conseguir que todo el equipo esté de acuerdo, sobre todo en medio del caos, pero se puede alinear sobre la mejor solución para este momento, para cumplir la misión, para resolver el problema en cuestión.
- Pasar a la acción
Aunque poner en práctica el plan parece sencillo y obvio, muchos ejecutivos dudan, retrasando su respuesta para meditar sobre otras posibilidades o intentar proyectar si su solución funcionará.
No tiene tiempo para seguir hablando de ello. Deje de perder el tiempo y hágalo. Todos deben centrarse en la solución y no en el problema.
Siguiendo estos pasos, los ejecutivos no sólo pueden encontrar una salida a su crisis, sino que pueden idear nuevas innovaciones que revitalicen sus empresas.
El caos te hace más fuerte. Cuando tienes el valor de pasar a la acción, no sólo ves de lo que eres capaz, sino de lo que es posible, y sigues haciéndote más fuerte e innovador.
Este artículo se publicó primero en Vistage US, puedes leer la versión original en inglés aquí.